Todo por la Belle Epoque

Que seas paranoide no quita que haya insectos en el techo
ni la mitad de salvajes que yo

dirías que, después de tantos años
ya conoces mis verdaderos colores?

Contigo he estado atada al sentimiento
de estar exactamente donde debía

conseguía integrar que los malos momentos
sólo eran como a veces la suerte se desenvuelve

te he tratado como a nadie
con lo mejor que llevo dentro

Ir de la mano es mucho más íntimo que el sexo
y hacer el amor es el oasis de serlo

materializados únicamente por el Deseo
es de valientes hacer de tu vida un puñado de sueños

Sólo seguí mi sed aquella noche, cómo puede eso estar tan mal
es un instinto tribal, quise fluir para conservar en el recuerdo

la ciudad me ofreció lo que mi espíritu perseguía
y tuve que tomarlo, siento si crucé la línea, tenía tanta energía

Sabes quien soy
así que no lo olvides cuando más nos necesita

Y bien, hablemos de libertá
todo lo que he aprendido ha sido o sola o por tener que recobrármela

nunca me gustó aquella cita de Rousseau
yo confío en la expansión

vale que yo lo llame individualidad y tú egoísmo
pero el respeto no se pierde por el camino

mi intención es hasta el final, alcanzar tus resquicios,
aspiro a vernos los trapos igual que los caprichos

la gente la caga todo el rato,
hay quienes piensan de más y quienes de menos

que mis actos choquen con tus creencias
no somos ni tú ni yo, me dan pena estas personas nuevas

¿ debiera esconder mi esencia por el bien de la eternidad
… cuando justo siempre alentaste mi desastre

Estas emociones mezcladas se confunden con ansiedad
pero el abrazo que me negaste y querernos era el único plan

ahora me alegro de quedarme a lo que surgiera,
aunque me odiaras una noche para ti larguísima

la locura era parte del trato, corrí sus riesgos
y salió perfecto, sí, las chicas tenemos que tener cuidado

no pude contarte
lo que aún no me lo has preguntado

ni de las bóvedas ni de las pieles
ni… que borrosa andaba de fiesta pero murmurando un enfado

en diferentes veladas
tú levantándote a cada hora, yo me creía soñando

A merced de tu espacio
lo más triste es que llegué a mirar precios de hostales

mi derecho a la diversión ha resultado tan caro
qué mal trago, cuánto va a durarme tu castigo

En el cementerio te conté
que la mayoría de estos artistas habían sido infelices

ten piedad de esta poeta desquiciada
a la que le pierde la farra

acabé en el cuartucho abuhardillado de alguien,
desde el ventanuco le dije algo extraño y dulce al cielo

Todo por la Belle Epoque… nunca quise herirte, me quise libre
y además, Orión siempre tuvo por misión el volcar de tu sonrisa