Te pareces a tu vida
a tu look, a tu gente

al frío que pasas por imprudente
y a esas ojeras, que no niegan
no saber decir que no

a lo que no dices

cuando enfureces

y te pareces tanto a mí
las madrugadas en que expresas tu amor
por lo que todavía no entiendes

que cómo cuesta luego aunarse a ninguna lógica

por necesidad gritas hoy nadie duerma

Eres donde depositas tu esfuerzo
mil veces más
que toda tu fatiga de años y fantasmas junta

tus aciertos más que tus errores eres

las mentiras que te perseguían
y ahora son demasiado lentas
porque, ni aunque pudieras, sabrías volver

y hasta eres, también
lo que crees no ser

Te pareces a lo que no hiciste por cobarde
y a lo que sí
aun pasando mucho miedo

a los pensamientos intrusivos que te pueblan

a los accidentes blancos y a tu peor enemigo

a quien te hizo un agujero en el pecho que retumba
sólo para que entendieras quien eras, eres
la primera vez que estás aquí
pero yo te conozco y tú me recuerdas
a cuando fuera del mundo
te empeñaste en caer y algo empezó a morir

donde quemaste quimeras y llenaron el cielo trizas de papel

cuando endureciste
porque no era tu turno
tocaba callar y atender

Más incluso que a tu pasado y a tu barrio

que al cuerpo que arrastras con sus correspondientes motivos

más que a los remordimientos
y a buscarle
a cada abandono el sentido

te pareces a lo que quieres

a lo que haces te pareces

– lo estás haciendo mejor de lo que piensas –

y a lo que imaginas, no sabes cuánto

Te pareces a lo que imaginas
mucho más de lo que te imaginas _

2 comentarios sobre “Te pareces a tu vida

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